Kiwi, conócelo mejor…
El kiwi verde es el kiwi por antonomasia y el buque insignia de Zespri, además de ser la variedad más conocida a nivel mundial.
El kiwi Zespri Green está disponible durante todo el año: un excelente aporte de vitaminas para los meses de invierno y un snack refrescante en verano.
Una delicia refrescante
El kiwi Zespri Green es refrescante, jugoso y tiene un sabor ligeramente ácido. Es idóneo para llevarlo contigo allá donde vayas y, además, te aporta las vitaminas y los minerales que necesitas.
Ideal para refrescarte. Solo o combinado con otras frutas u hortalizas, puedes usarlo para preparar batidos sanos y sabrosos.
Ayuda a limpiar el paladar cuando acompaña platos muy grasos. Combina muy bien con pescado azul y carnes grasas.
Es perfecto como contraste en ensaladas con vegetales de sabor amargo, como la rúcula o las endivias.
Utilízalo para dar un toque especial a tus platos. Puedes añadir unos dados de kiwi en un sándwich, unas rodajas para acompañar una receta de pollo o servir un pescado al horno con una salsa de crema de kiwi con hierbas frescas.
Beneficios para la salud
Zespri Green está repleto de nutrientes, como la vitamina C y otros antioxidantes, y, además, es el “número uno” en fibra. El kiwi verde contiene más fibra que tres bastones de apio y añadiéndolo a tu dieta conseguirás mejorar tu función digestiva, manteniendo la regularidad y previniendo el estreñimiento.
También es una buena fuente de potasio y fuente natural de folato.
La incorporación de dos kiwis Zespri Green diarios a tu alimentación te aporta sensación de ligereza y bienestar
Origen
Zespri Green está disponible durante todo el año porque Zespri cuenta con plantaciones tanto en el hemisferio norte como en el hemisferio sur. De mayo a noviembre, esta sabrosa fruta proviene de Nueva Zelanda y de diciembre a mayo, de Italia, Grecia y Francia.
Almacenamiento
Los kiwis Zespri Green pueden conservarse en el frigorífico durante aproximadamente dos semanas desde que se adquieren en la frutería. Para ralentizar el proceso de maduración, consérvalos en el frigorífico y alejados de otras frutas. Por el contrario, para acelerar su maduración, guárdalos en una bolsa de papel a temperatura ambiente junto con manzanas, naranjas, plátanos o peras, pero siempre lejos de la luz solar.